En una sociedad que es adulta:
Las posiciones correctas de la unidad y de la polaridad es la unidad en el interior del individuo y la polaridad en su exterior.
Cuando una energia negativa invierte esas dos polaridades se producen situaciones molestas.
Pues en el interior del individuo aparece una dualidad negativa que divide su personalidad creandole dudas, inseguridades, contradicciones y confusiones.
Por otro lado en el exterior aparece una unidad negativa, la cual se refleja en cualquier objeto animado o inanimado del entorno como pueda ser una persona que subyuga al individuo y le absorve como si fuese lo unico, el todo, haciendo que el individuo le siga con absoluto y ciego fanatismo.
Esa misma accion de seguir a ese elemento o ser unico en el exterior a su vez seguirá produciendo una polaridad o dualidad negativa y conflictiva en el interior del individuo.
Esa energia negativa que aparecera en el interior del individuo le mostrará a su vez que esa presencia externa como pueda ser esa persona que afirma ser lo único es una presencia negativa pues es la que le esta produciendo y alimentando la negatividad interna, es decir, esas dudas, confilictos y confrontaciones internas que dividen la personalidad del individuo creandole una gran inseguridad y falta de confianza en si mismo.
Pues la presencia negativa de la unidad en el exterior habrá estimulado en él la presencia de la dualidad (polaridad) negativa en su interior.
En este caso dependiendo de las malas intenciones de dominio que la persona idolatrada tenga sobre el individuo que la idolatra esta podra ejercer sobre su victima mas o menos control, pudiendo llegar a ser una verdadera tortura existencial a traves de esa dualidad que produce en el interior de su victima, de ese individuo sometido, el cual puede estar tan desposeido de su propia voluntad que sienta hallarse en un paraiso, sin darse cuenta de que su sometedor está ejerciendo un violento ataque contra él, para desposeerle de sus pertenencias materiales, mente, emociones y voluntad, y dejándole en un estado caótico de dependencia en el que la víctima con la mente anulada y sin capacidad seguira pensando que se halla en el paraiso, sin darse cuenta de que es un paraiso artificial, una carcel que le está privando de su propia libertad.
Al situar la unidad en el exterior el foco inteior del individuo se ve proyectado, absorvido por ese foco y desplazado al lugar en el que este se halla.
Lo cual hace que todos los objetos fisicos animados e inanimados que existen en torno al individuo y que se hallan entre ese foco y el individuo molesten a este realmente de un modo interior, pues todos esos objetos se estan interponiendo entre él y su propia luz interior que en ese momento se halla reflejada en el exterior, en ese foco que se presenta ante él como lo único.
Pues ese individuo ya es un ser adulto y con su mente ya esta interactuando con su exterior, con su entorno y todos los elementos y objetos animados e inanimados que se hayan a su alrededor.
Es decir que la mente adulta de un individuo se proyecta en su entorno, e interactúa con este, y con el curso de la evolución la mente adulta adquiere cada vez un mayor control del entorno material hasta llegar a que el individuo adulto con su mente sea el verdadero conductor y hasta creador del entorno en el que está, diseñado, creado, conducido y hasta realizado con su propia mente.
Asi el entorno del individuo llega a ser una manifestación de sus propios pensamientos los cuales han tomado forma fisica y por lo tanto son su propia creación mental.
Por eso si ante ese individuo de un nivel mental evolucionado se presenta otro individuo con un nivel mental tambien alto y este le agrede presentándose ante él cómo su único jefe y pillàndole en un momento de debilidad le convence momentaneamente de ello es decir que con su ataque consigue confundirle y engañarle eso hará que el individuo adulto y víctima pierda por un momento su foco interno, el cual se verá proyectado y poseido por ese individuo agresor externo, el cual con el foco de su víctima en sus manos hará que ese individuo sometido sienta en su mente (en el entorno creado mentalmete por el individuo victima) a todos esos objetos materitales del entorno que le separan de su foco interno que en ese momento se halla proyectado en ese punto del exterior.
En esa situación los objetos fisicos del entormo se imterponen entre ese punto exterior y los ojos del individuo, el cual captará a esos objetos interferentes como verdaderas espinas psiquicas que se clavan en su mente (en el entorno creado por su mente) produciendole un enorme dolor interno, y a su vez el gran conflicto interior, duda, intranquilidad, nervios, confrontacion, inestabilidad y malestar interno.
En esa situacion el agresor esta atacando a la mente del agredido.
De lo cual se deduce que el agresor le está atacando con su propia mente.
Es decir que se trata de un ataque mental, en el que el agresor pillando desprevenido al agredido le ha sometido mentalmente produciendo en él un enorme trastorno interior, pues al presentarse ante él cómo una unidad externa le ha producido una polaridad interna.
Si esa situación se desarrolla así produciendo malestar eso es un indicador de que nos hallamos en una humanidad que ya es adulta en la cual para ir bien la unidad debe de estar en el interior del individuo y la polaridad afuera de él.
Por eso si en una sociedad adulta la unidad se presenta afuera y la polaridad se presenta adentro eso produce malestar, pues así ambos elementos se presentan afuera de lugar.
Sin embargo en el niño y en una sociedad infantil es al revés, es decir que la unidad (el buen jerarca y tutor) se presenta afuera y la polaridad (el proceso de formación) se presenta adentro.
Pues el niño aún no está formado, es decir que las esencias que forman la personalidad del niño, su cuerpo, su mente, sus emociones y su voluntad aún no están formadas, sino que están siendo formadas por esa unidad externa que representa su tutor que es quien le guía como único y positivo foco a través del proceso de formación del niño.
Por eso cuando el niño sigue a su tutor... en la mente del niño los objetos del entrono no se interponen dolorosamente entre el niño y su tutor, ya que la mente del niño aún no está formada ni proyectada a su alrededor para poder ser interferida por otra mente, tal como si que sucedía en el adulto.
Además de que esa única presencia externa que representa el tutor del niño tampoco puede producir una polaridad negativa en el interior del niño tal como si que la producía en el adulto, pues en el niño es buena la polaridad interna al igual que es buena la unidad externa, mientras que en el adulto es al revés, la polaridad es buena afuera pero no adentro y la unidad es buena adentro pero no afuera.
Pues cuando el niño ya está formado su personalidad ya está completa.
Su tutor ha completado la formación del niño incluyendo en esta todas las virtudes e ingredientes que necesita para estar completa y pasar a ser una personalidad ya hecha y adulta, a partir de la cual el niño ya trasformado en adulto empezará a desarrollar su vida adulta basado en su personalidad.
Esa personalidad ya formada del adulto es su personalidad cero relativa.
Ese concepto cenuítico de la personalidad cero relativa es importante para comprender que la personalidad de un adulto, que para él es lo mas básico, es su agua inodora e insabora, en realidad está compuesta de miles de sabores, olores, matices y colores que cuando era niño su tutor incluyó en él para formar su personalidad adulta, y que cuando ese niño ha pasado a ser adulto toda esa diversidad de matices distintos que forman su personalidad adulta pasan a formar parte de ese tejido básico, de ese agua elemental que representa a la personalidad del propio ser y que para el ser adultp es inodora e insabora pues forma parte de su personalidad. El individuo adulto ya está tan acostumbrado a todos esos matices, sabores y olores que forman su personalidad que él mismo ya no los capta y los percibe como el agua o el aire, es decir como esos elementos incoloros e insaboros que forman su personalidad, como esa página en blanco en donde el ser adulto va a escribir y dibujar la historia de su propia vida.
Aunque los demas individuos de su propio mundo si que captan esos ingredientes de la personalidad cero relativa que el propio individuo no capta.
Hay una personalidad absoluta relativa que no podemos oler su contenido pues es realmente la personalidad mas elevada ante la cual todos somos niños.
Esa gran personalidad es la que le suelen llamar Dios, o Padre universal, o el Creador, o como cada cual le llame, aunque prevalece siendo siempre esa gran personalidad que nunca hace daño a nadie invirtiendo los dos elementos de polaridad y unidad, pues ante esa personalidad mas alta todos somos sus seres creados, sus hijos, siempre somos niños, con una buena polaridad en nuestro interior y una buena unidad en el exterior. Una unidad que es su continua presencia protectora en el techo mas alto de nuestro mundo y una polaridad que es su presencia continua en nuestro interior en el que hay dos elementos, uno es la presencia del propio ser y otro es la presencia del gran ser. Es decir la presencia unica de Dios en el exterior y la presencia dual e interior del propio "Yo" interno del individuo ante la presencia interna de Dios.
Ese Dios de un nivel mas alto no quiere que nosotros que somos sus hijos nos peleemos emtre nosotros ni como personas, ni física, ni mental, ni emocionalmente, sino que vivamos en paz entre nosotros, para que así podamos crecer bien y algún dia llegar a ser como Él, un creador de universos llenos de vida, creados y conducidos con la propia mente creadora.
En ese nivel mas mas alto siempre somos sus hijos, siempre somos niños, aunque en los niveles mas bajos podemos figurar como seres adultos en esos respectivos niveles mas bajos, en los cuales y de un modo cíclico y alternativo vamos pasando de ser niños a ser adultos; Por lo que en los distintos niveles de existencia que conviven en cada ser se van alternando en cada ser sus respectivas personalidades de niños y adultos, que van cambiando y cruzándose entre sí cómo las hebras del ADN, dando así a cada ser toda la variedad de facetas evolutivas existentes, con todos los niveles, en los cuales cada consciencia de cada individuo va pasando de un nivel a otro cómo girando cada cual en su respectiva cesta de la inmensa noria infinita y relativa de la existencia. Además de que toda esa vida plurificada hasta la infinitud relativa de cada ser est;a entrelazada, comunicada, combinada y unida con los demás seres en un contacto, feliz, sano, en un contacto infinito, y eterno relativo.
Es curioso y a su vez gracioso darse cuenta de que aunque cada ser siente que la base de su forma de ser es el agua inodora de su personalidad, en realidad por encima de la consciencia de ese ser adulto existe un padre, un ser en su inmediato nivel superior, que es quien está formando ese agua básica que teje y construye con infinidad de matices y situaciones vividas la personalidad básica de su hijo, del individuo, que este capta cómo el agua de su forma de ser básica y sobre la cual cómo base edifica su vida.
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Es gracioso por el hecho de que el ser adulto no es consciente de todos esos matices y colores que forman el agua de su propia personalidad.
Lo cual es similar al no ser consciente de lo que los padres han hecho en el cuidado de un hijo haasta que la personalidad de este ya se ha formado y ha pasado a ser un ser adulto, el cual no suele darse cuenta ni ser consciente de lo que sus padres han hecho por él.
La personalidad cero telativa de un individuo es similar a esos mares de amoniaco presentes en otros planetas los cuales para sus habitantes es el agua que beben, pues para ellos el amoniaco es su agua cero relativa, al igual que para ellos lo que captan como salfuman es para nosotros nuestra agua cero relativa.
O lo que para nosotros es monoxido de carbono para ellos es el aire puro inoloro, trasparente, básico y cero relativo, mientras que lo que para nosotros es el aire puro y cero relativo para ellos es gas metano.
Pues ellos, es decir esos supuestos habitantes de otro planeta y nosotros somos diferentes, tenemos diferentes sentidos con los que captamos nuestro entorno.
Aunque no por ello dejamos de ser compaginables de un modo armónico dentro del gran universo, existencia y creación de ese Gran Dios, cómo hijos suyos que todos somos.
Fernando Ortolá
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