Ser bueno para ir al cielo genera el ser malo para vivir en la tierra.
Los mismos que te educan con la religión para que te ganes el cielo siendo bueno son los que incitan a ser combativo y malo para poder sobrevivir en la sociedad.
Ser bueno con el malo es igual de malo que ser malo con el bueno.
Ser malo con el malo es igual de malo que ser bueno con el bueno.
No es bueno poner condiciones al ser, se, simplemente se.
No es necesario explicar porque se es, con ser es suficiente.
Soy, fui y seré.
Eres, fuiste, y serás.
Ser es estar en el Es, en lo que hay que hacer en la humanidad adulta en la que estamos, activando las esencias, el cuerpo, la mente, las emociones y la identidad, para alcanzar pacificamente el Equilibrio de la Sociedad,... el Es, la doctrina natural de hoy, lo que no es necesario predicar pues esta escrita en el interior de todos los seres, en el corazón de todo ser viviente, por eso no hay más dejar los Feses (las limitaciones) y hacer lo que hay que hacer, activar las esencias para ir tras el ES, ser tu mismo, seguir la voz de tu corazón, ser tu mismo, y no porque te lo diga yo, sino porque lo dices tú mismo, ya que es el verdadero deseo tu corazón y del corazón de todo ser. El estar en el ES, en el estar Ahí de siempre. Ahí.
No dejes de estar Ahí por ir a eliminar los Feses, estate Ahí y el Ahí (el que siempre está Ahí en la armonía) rliminara las limitaciones.
Observemos un poco más profundo las esencias que componen nuestro ser.
Por eso si no estáis Ahí activando las esencias (el cuerpo, la mente, las emociones y la identidad) como adultos para ir tras el PA (el equilibrio de la sociedad, el ES, el Proyecto Alfa etc) entonces la oscuridad (el desequilibrio) llenará vuestro cuerpo, vuestra mente, vuestras emociones y vuestra identidad haciendoos sentir mal y produciéndose enfrentamientos, y enfermedad.
Pues en la presente era de adultez de la humanidad en la que estamos el Ahí nos da a todos el despertar de las esencias y el ir con paz tras el equilibrio de la sociedad, y si lo hacemos así y estamos Ahí entonces conectaremos con la armonia presente en lo más profundo de nuestro ser en la que las esencias están siempre en armonia y ninguna desarmonia o desequilibrio externo e infantil nos podra afectar pues estaremos Ahí tomando lo que el Ahí nos da, la activación de las esencias tras el PA.
Los seres infantiles que aún no han profundizado en su propio ser viven la desarmonia externa de esencias alteran los ciclos de comunicación de esencias con los denas, invaden a otros con desarmonia dirigiendoles sus esencias a destiempo y con agresividad, si te encuentras con un ser así infantil que invade con violencia tu terreno en el área de cualquier esencia no te asustes, no dejes que te desequilibre, que quite tu atención de tu armonia interna de esencias continua estando Ahí tomando las esencias que el Ahí te da, la doctrina natural que el Ahí te da, despertando y activando tus esencias, tu cuerpo, tu mente, tus emociones, y tu voluntad, tras el PA, esrate Ahí como siempre, en tu armonía interna, por el camino de la paz, y ninguna invasión oscura y desarmónica podrá afectarte, pues la luz mantendrá tu paz, tu felicidad, tu salud, en todas tus esencias, en todo tu ser, y también ayudará a que el individuo del cual venia esa oscuridad invasora hacia ti se relaje, regrese a su armonía interna y desaparezca de él también la oscuridad y el desequilibrio que le había invadido y de él retroceda también la oscuridad hacia el individuo del cual le llegó, y de este retroceda también hacia su fuente de origen y así sucesivamente. Para lo cual no hay más que estar Ahí.
Es normal que los niños y seres infantiles se desestabilicen y se desequilibren más fácilmente, pues no han profundizado aún en su armonía interna, cuando lo hagan desaparecerá de sus vidas el caos y la desarmonia y se sentirán bien, habrán llegado también a la adultez.
Y mientras sean niños o infantiles hay que protegerlos y ayudarles a crecer estando Ahí ante ellos para calmarles y darles armonia paz y salud, hasta que algún día profundicen en su armonía interna y pierdan el desequilibrio alcanzando también la adultez.
Un abrazo grande.
Fernando ortola.
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