Páginas

martes, 23 de enero de 2024

Los deberes del ser adulto

 

Hay que hacer lo contrario de lo que el orientalismo dice, no hay que ir a despertar el ojo interior sino que hay que dejar que el despertar del ojo interior venga a ti, la Ena, tal como vino a mí arriba del monte Montgó.

Pues esta es la dinámica del set adulto, en el interior las cosas llegan a él y en el exterior él consigue las cosas iba tras ellas al revés que en la dinámica del niño en la cual en el interior el persigues sus cosas y en el exterior los recursos hospitales llegan a él.
No hay que ir al lugar interior espiritual, superfluo e infantil en el que se va detrás del despertar del ojo de la conciencia, detrás de las llaves y las iniciaciones que lo conceden o que suponen que lo conceden sino que hay que ir al lugar más profundo del interior, el lugar adulto en el cual el despertar de la conciencia y el ojo no se busca, no se persigue, sino que aparece, llega solo en su momento y tan solo hay que esperarle en el lugar profundo del espíritu del ser adulto.
En el lugar profundo y adulto del espíritu la respiración es más profunda y pausada a diferencia de la respiración del lugar espiritual superficial de los niños en donde persiguen el ojo con excitación y la respiración es excitada tal como la proponen desde Oriente y que por estar afuera del lugar en los tiempos adultos de la humanidad actuales en vez de estimular el despertar del ojo interior adulto y profundo lo entorpecen y lo retrasan apartando al ser humano de la consciencia y de la igualdad que es la norma natural del ser adulto y manteniendo al ser humano en la infancia y en la jerarquía que corresponde a los niños y por lo tanto retrasando la sociedad igualitaria en el mundo y favoreciendo la jerarquía afuera de lugar, es decir la jerarquía de los niños en tiempos de los adultos, es decir la oligarquía, la supremacía de los ricos sobre los pobres, de los falsos jerarcas sobre la mayoría de la humanidad, de la represión de un grupo de gente hacia el resto del mundo, para lo cual les conviene importar esas terapias de Oriente como la de detener la mente o pausarla en las meditaciones o como la de perseguir las iniciaciones o las llaves o las fórmulas de conexión con la conciencia interior que ofrece Oriente, pues todas esas prácticas pertenecen al período infantil de la humanidad y por lo tanto favorecen a la jerarquía afuera de lugar y dificultan la llegada de la sociedad igualitaria y justa para todos por igual.
El niño debe de estar activo en el interior, en él mismo, en la formación de su propio ser el cual aún está en el proceso de formarse y se debe de activar en ello y en el exterior debe de estar pasivo porque aún no puede conseguir los recursos materiales básicos por sí mismo sino que es su tutor, el buen jerarca, el que se los suministra.
El adulto es al revés, en el interior debe de estar pasivo pues ya está formado y en el exterior deberá estar activo porque al ya estar formado ya está preparado para conseguir las cosas por sí mismo y debe de conseguirlas como único medio para poder conseguir las cosas haciendo llegar a él los recursos vitales que necesita para su subsistencia.
Por eso el niño debe de activarse en despertar en él todas esas virtudes interiores como son por ejemplo el ojo de la conciencia. Deberá perseguir el aprobado de sus exámenes ante su tutor, la aceptación, el logro, la meta, la llave, la profesión, y sin embargo el adulto en su interior, en su profesión, ya ha conseguido esas cosas y ya no debe de ir tras ellas, ni tras la llave, ni tras la iniciación, ni trás la formación de su profesión, ni tras los exámenes y las pruebas, pues ya ha conseguido esas cosas y ya está formado, ya es adulto, y lo único que debe de hacer en su interior es esperar a que el ojo de la conciencia llegue a él en cada momento para dirigirle en las cosas que debe de hacer, en el exterior material, en el cual sí que debe de estar activo trabajando en su función, pues ya está preparado para ello, para conseguir esas metas que se propone, es decir para el alcance de los recursos básicos que le permitan la subsistencia.
Al niño hay que enseñarle a respirar tal como sugieren las técnicas y terapias de Oriente, pero en el adulto la respiración ya funciona por si sola y hay que dejarla fluir de esa manera para que vaya bien.
Pues el niño aún no tiene formada su conciencia y aún no está preparado para improvisar ante las cosas que suceden en el mundo exterior sino que debe de ir tomando cada una de ellas de un modo pausado para poder ir asimilándolas al igual que en los pasados tiempos infantiles de la humanidad veían el exterior como dioses que tenían que ir incorporando cada uno de ellos, cada una de las esencias que necesitan para formar su interior. Cada dios en su momento, cada esencia en su tiempo, cada cosa en su lugar, para ir asimilando cada una de ellas y formando el interior del niño.
Pero el ser adulto ya tiene el ojo, la voz y la conciencia formados y por lo tanto ya está preparado para improvisar en el mundo exterior en el cual el único modo de subsistir no es pararse y detenerse en formarse en cada esencia que llega a él en cada cosa que la vida le presenta en cada Dios en cada circunstancia en cada momento, pues ante el ser adulto llegan muchos momentos, circunstancias, esencias, dioses, situaciones, que son tan diversas y diferentes entre sí que no tiene tiempo de detenerse en cada una de ellas tal como el niño sí que tenía pues el niño aún no podía dar una respuesta para cada una de esas situaciones y esencias, aún no estaba formado ante cada una de ellas y en cada una de ellas, pero el adulto sí que lo está, sí que tiene esas esencias integradas en él mismo y ya está preparado para poder manejarlas en el mundo exterior y para ello no debe de detenerse en cada una de ellas en cada esencia en cada Dios para adorar a cada una de ellas y formarse en cada una, pues ya está formado y ya está preparado para atender a todas las esencias que llegan a él en cada momento y para lo cual la única posibilidad de poder hacerlo es improvisar es decir seguir la voz de su conciencia interna, su capacidad de improvisar, pues el ser adulto a diferencia del niño ya tiene la voz de su consciencia y su instinto de improvisar despierto y en él debe de seguir la voz de su conciencia de su corazón en cada momento es decir que debe de actuar de un modo libre e independiente siguiendo su propio determinismo, improvisando en cada momento, eligiendo la mejor forma de actuar en cada circunstancia, para así poder armonizarse con todas esas esencias que le llegan en cada momento, para mantenerlas todas en su integridad como las vitaminas, las esencias que necesita para poder estar sano y subsistir, para lo cual se debe de relacionar con todas las esencias que llegan a él en cada momento que son tantas y tan diversas que al ser humano adulto no le da tiempo de pararse en cada una de ellas para comprenderla, para asimilarla y para formarse en ella. Pues el ser adulto ya está formado en cada esencia ya las ha asimilado todas ellas en su proceso de infancia y tan solo debe de relacionarse con ellas intercambiar los frutos, las vitaminas que cada esencia le ofrece y que forman parte de su alimento y de su integridad y que le permiten subsistir en cada momento con salud y bienestar.
Las esencias que llegan interiormente al niño le van llegando de un modo lento y pausado como valiosas joyas, valiosos dioses, que el niño debe de ir asimilando e integrándolos en su ser, pero en el ser adulto esas mismas esencias, esos mismos dioses, esas mismas joyas le llegan de una manera muy acelerada, tanto que no puede pararse a vivir cada una de ellas de un modo especial sino que debe de ir relacionándose con ellas tal como llegan y para eso se ve forzado a usar su conciencia despierta, su capacidad de improvisar, para poder solucionar cada momento de su vida externa en la relación con todas las esencias que van llegando a él, para mantener una relación armónica con todas ellas y un intercambio de frutos con todas, para poder alimentar su ser en cada momento que le permita la subsistencia, el alimento que necesita para ello.

El autismo refleja este principio pues el autista no puede mezclar las cosas al igual que el niño tampoco puede mezclar las esencias porque aún no tiene despierta la voz de su conciencia interior para poder improvisar ante esas esencias que van llegando a él de una manera más acelerada.

-----ooooo-----

Lo cual muestra que el artista es un ser adulto que se ha quedado bloqueado en el período infantil es un reflejo de lo que pasa en la humanidad en el presente la cual tiene frenada su evolución hacia la igualdad de los tiempos adultos a los que estamos frenada por la oligarquía por la jerarquía oscura fuera de lugar lo cual produce anomalías como por ejemplo es la del autismo la cual refleja a su vez ese mismo problema social de la jerarquía fuera del lugar que obstaculiza el desarrollo de la humanidad hacia la igualdad de los tiempos adultos en los que está.

Los tiempos del niño el mundo está ante su vertical es decir el mundo es infantil y está ante la formación de su propio ser es decir dirigiéndose al interior a la formación de su propio ser y por lo tanto está ante la vertical y al estar ante la vertical por eso Occidente tiene frente a él o a Oriente y por eso al ser la vertical el horizonte es decir la meta del ser humano infantil por eso en los mapas antiguos se situaba Oriente en el norte.

Pero en los tiempos presentes adultos de la humanidad en los mapas se sitúa el Polo Norte en el norte es decir que el mundo está no ante la vertical sino ante la horizontal del seno pues al ser adulto su meta es la horizontal es el exterior es formar la sociedad y por eso se presenta ante la horizontal teniendo el Polo Norte arriba tal como se ve en los mapas actuales.

Pues la vertical representa el interior y la horizontal representa el exterior.

La oscura jerarquia exterior no se siluciona siendocviolentos en contra de la oscura jerarquia, la oligarquia, pues ellos no tienen la culpa ya que esa oscuridad del mundo se refleja de los individuos hacia el colectivo del exterior formando a oscuros oligarcas y dirigentes dictadores los cual es también su víctimas de ese proceso de reflejo de la oscuridad de celos individuos hasta el colectivo del interior hacia el exterior tal como todo se desarrolla igual que las plantas nacen de su semilla del interior de la Tierra hacia el exterior lo mismo sucede en la humanidad.

Por eso la solucion de ese problema no es ir a ser violentos en contra de esos dictadores, pues ese seria el tipico error de tapar el mal pero no eliminarlo de raíz.

La verdadera solucion al problema es que todos los individuos en sus vidas personales amen al prójimo y a:Dios pues así este, el Dios invisible de los adultos (la voz de la consciencia adulta, el ojo de la consciencia ) sea quien ayude para que todo vaya bien y que el ser adulto de la humanidad actual pueda alcanzar su meta que es la formación de una buena sociedad de igualdad empezando a dirigirse hacia ella pues esta simple predisposición de ir hacia la buena sociedad ya aporta el bienestar, el estar Ahi, que el ser adulto necesita en cada momento, pues el dios invisible de los adultos le ayuda.

Ya que el propósito principal en nuestra vida no es el alcanzar la meta de los ciclos como es la buena sociedad en los tiempos adultos o la formación del ser en los tiempos infantiles sino que es en cada momento estemos en el periodo infantil o adulto cumplir con la norma natural de cada momento para que así crezca en nosotros el amor del Dios y Padre bueno que nos crea y nos conduce en todo momento seamos niños o seamos adultos.

El niño tiene todas las esencias concentradas y siempre está dispuesto a realizar cualquier acción, saltar, dibujar, comer, dormir, jugar, estudiar, etc.
Sin embargo el adulto es diferente pues en él las esencias no estan siempre concentradas, es decir que no est;a siempre preparado para saltar, o para comer, o para dormir, o para correr, sino que debe esperar a que en sus ciclos de vida vengan los momentos de hacer cada cosa. El adulto mismo debe de determinar por él mismo la actiyud que debe de adoptar ante cada circunstancia, pues el adulto ya tiene su consciencia despierta para poder saber por si mismo cual es la esencia que necesita en cada momento y asi lo debe de hacer para poder mantenerse en salud, sin embargo el niño aún no sabe elegir por si mismo la actitud que debe de adoptar en cada momento y por eso necesita tener todas las actitudes concentradas en el, todas las esencias para que asi esté preparado siempre ante cada circunstancia que se le pueda presentar en el exterior, pues para ello el tutor del niño (el buen jerarca) prepara a este aportandole siempre todas las esencias que necesita para que asi pueda mantenerse su salud para poder formarse hasta el punto en el que alcance la adultez y ya pueda administrarse el mismo sus propias esencias segun su propia determinacion adulta y consciente, y ese será el momento en el que las esencias, es decir, las situaciones y circunstancias externas empiecen a llegar al adulto de un modo distinto a como llegaban cuando era niño, es decir de un modo variado y mas amplio de modo que el adulto para poder adoptar la situacion correcta ante cada circunstancia deberá de hacer uso de su formacion adulto y capacidad de saber que postura adoptar ante cada situacion y circunstancia que se le presente del entorno, por muy deprisa o de modo variado en el que cada circunstancia se presente ante él, pues cada una será recibida por el ojo de la consciencia el cual ya está despierto en el adulto.

Los ciclos de esencias que se repiten en el adulto son más amplios que los que se repiten en el niño.

Por eso el adulto debe de saber determinar tanto en el tiempo como en el espacio todas las esencias que necesita para poder mantenerse íntegro y sano, y el adulto mismo es el que debe de administrarse esas esencias en el espacio y en el tiempo.

El niño sin embargo no es necesario que se administre las esencias que necesita en cada momento, pues es el tutor el que se las administra y de un modo más concentrado, y eso también va acompasado con las circunstancias en las que el niño se encuentra las cuales son más estáticas y menos continuas, más concentradas y con menos amplitud en sus estructuras espaciales y ciclos temporales a través de los cuales esas esencias se presentan, mientras que en el adulto esas mismas esencias se presentan en ciclos espacio y de tiempo que son más anchos que en el niño.

El niño no está preparado para poder comprender el por qué de las esencias que van llegando a él concentradas como un ramillete de flores de supervivencia que su tutor el ser adulto le ofrece en cada momento con todo su amor.

No lo puede comprender porque el niño aún no tiene su mente formada para poder comprenderlo.

Sin embargo, el adulto sí que está preparado para poder comprender cada esencia que llega hasta él y para poder elegir por si mismo cada esencia. la posición correcta a adoptar en cada circunstancia tomando la esencia correcta en cada circunstancia.

Ente el adulto la vida le va presentando las mismas esencias, las mismas flores que al niño le llegan concentradas en un ramillete, pero al adulto le llegan separadas, sueltas, y por todos los lados, a su alrededor, de modo que el adulto debe de saber improvisar y haciendo uso de su consciencia adulta elegir la flor correcta en cada momento, para asi poder mantenerse íntegro y con salud. El ser adulto tiene su consciencia formada lo cual le permite el poder realizar esa función.

El ramillete de flores del niño refleja la jerarquía en la que el niño está pues todas las flores están unidas en un solo punto dentro de la jarra que las contiene, es decir que están concentradas en la jerarquía del buen jerarca o tutor del niño el cual concentra en el mismo a todas las flores que ofrece al niño para su subsistencia.

Sin embargo las flores sueltas que llegan al adulto reflejan la sociedad igualitaria que el ser adulto necesita para poder sobrevivir, rodeado de individuos libres e independientes, como las flores esparcidas del ramillete y que representan a los demas seres con los que debe de relacionarse bien con cada uno de ellos, para asi poder construir y mantener entre todos una buena sociedad.

Al ser adulto que no hace los deberes le come el Momo de los niños.

Los deberes del ser adulto son el esfrozarse en intentar comprender de un modo un poco mas profundo el mundo en el que vive.

Un deberes de los que muchos huyen con verdadero panico pues esa tarea les lleva a comprender la igualdad con los demas que no quieren aceptar, en realidad de un modo infundado, ya que esa igualdad de la que con panico huyen es en realidad la mayor felicidad y bienestar.


Fernando Ortolá


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Conclusiones y opiniones de los lectores: