La sana ¨locura¨ y la nueva glándula naciente

La locura es buena en su primer impulso natural con el que emerge del interior de alguien hacia el exterior, como un acto energético, distinto y extravagante.

Si se le deja emerger asi tal cual, entonces ese tipo de locura inicial, natural y en estado puro, no dañará a nadie, ni a uno mismo ni a los demás, al contrario, será tan solo portadora de paz, amor e igualdad, ya que en el lugar de donde sale, que es nuestro interior, está nuestro verdadero ser, la paz, el amor universal y el verdadero deseo de igualdad entre todos los seres. Por eso, cualquier cosa que proceda de ese lugar interior y profundo no es nunca mala sino alegre, feliz, natural, libre y buena, aunque en un principio se manifieste de un modo nuevo, distinto, extravagante, extraño e incomprensible, aún así seguirá siendo portadorá de paz, alegría, salud, igualdad, esperanza y felicidad tanto para uno mismo como para los demás.

El nacimiento de las modas tambien hace referencia al mismo fenómeno.

Tan solo cuando algo reprime a nuestro sano impulso extravagante en su salida desde nuestro interior personal hacia el colectivo exterior, es cuando, esa sana locura, al no tener vias de salida se transforma en dañina, pues explota en nuestro interior haciéndonos daño a nosotros y a los demás, ya que todo el sentimiento de alegria y de amor igualitario que traia desde el interior hacia el colectivo externo se habrá transformado en un sentimiento oscuro  de represión, de mal humor, capaz de desatar actos violentos hacia uno mismo y hacia los demás.

 En este caso, ese pobre reprimido que en un principio tan solo traia alegria, amor e igualdad para todos, habrá enloquecido y será tratado tristemente de loco, de vilento, de mala persona.
 Cuando en realidad no es él la causa del mal acto, sino que la causa ha sido quien  le reprimió a él en su buen acto inicial, justo en el momento en el que él lo estaba manifestando al exterior, transformandolo así en malo, y despues acusandole de malo a él, al reprimido, a ese pobre ser, que no es el malo sino todo lo contrario: el reprimido por el malo.

La sana ¨locura¨inicial es la percepción extrasensorial que se despierta, y la facultad de curar incluso a distancia.
Es el alarido feliz de nuestra voz mas profunda, verdadera e igualitaria, que nos impulsa a manifestanos al exterior de modo libre y espontaneo.
 Tan solo la represión que la jerarquía ejerce sobre la espontaneidad de nuestro alarido natural e igualitario es lo que puede transformar a nuestra sana locura en insana y dañina, lo cual no será a causa de lo que de dentro de nosotros salia, sino a causa del muro represor y jerárquico que no le ha permitido salir y expresarse,  por intentar impedir que la igualdad emergente hoy de modo natural y a través de todos, libere a los poseidos de la jerarquía de dentro de su sudado y pestilente puño jerárquico.

Cuando al fin te das cuenta de ello y confiando en el amor lo pones en práctica, dejando salir desde tu interior y sin temor a tu sana¨locura¨ , entonces la mal llamada locura deja de molestarte y empieza a despertarse tal como es, la facultad extrasensorial y humana que se despierta hoy en el HEN naciendo en el cerebro de todos en la forma de una nueva glandula, la extrasensorial, el Ahito, la glándula de la igualdad, la hermandad, la telepatia, la extrasensorialidad y la curación total, incluso a distancia.

Por eso es tan importante el comprender esto que ahora muestran los textos cenuitas, , para que la locura deje de molestar en su falsa apariencia de locura y pase a ser lo que es, la glándula extrasensorial que nace en el hombre. Para que ya de una vez se deje crecer a la glándula cerebral de la extrasensorialidad, de la igualdad y de la hermandad, que esta naciendo hoy dentro de todos.

 Para que asi podamos al fin amarnos los unos a los otros de igual a igual hasta en los niveles mas altos, plenos y sutiles, sin que este sea un asunto catalogado de inaceptable locura  y poder así con nuestro amor mutuo curarnos los unos a los otros al fin de todas las enfermedades, para que estas dejen ya de una vez de existir.

 Para que la jerarquía ya no vigente y productora de todos los males actuales por su interferencia en la igualdad vigente hoy, deje de invertir la realidad, acusando a la igualdad y a su sana locura, y regrese a su lugar jerárquico, a su sitio en donde esta ya no es mala y vive en paz, y deje así vivir al mundo en paz en la igualdad vigente hoy, para que la jerarquía al fin descanse en paz en su lugar en el HES y deje descansar en paz a la igualdad en su terreno y periodo de vigencia actual.