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viernes, 23 de febrero de 2024

El sentirse Dios es propio del niño y no del adulto


Solo un reprimido a causa de su inconsciencia puede reprimir a otro que sea como él, pero no a un consciente.

Las acciones desequilibradas se transmiten a uno y otro lado de la zona de desequilibrio a la que denomino el Sire para poder darle una observacion de estudio.

Cuando en una situacion determinada un individuo recibe el insulto de otro el cual de un modo violento le acusa de hablar demasiado el individuo atacado al oir el insulto que le dirigen se desequilibra yendose a un lado del Sire.

Pues se siente molesto y ofendido, y a la vez siente la agresividad y el deseo de vengarse hacia el primer atacante.

Lo mejor seria hacer las paces con el primer atacante.

Su consciencia adulta no esta despierta y no sabe como actuar con el primer atacante para hacer las paces con el.

Por eso reacciona con violencia hacia él insultandole tal como el le insulto primero.

De ese modo lavictima que antes estaba en la zona Adi de equilibrio al ser atacado fue desplazado a un lado de la zona Sire de desequilibrio y despues e situo en el lado opuesto de esa misma zona Sire.

Para regresar a la zona Adi hay que activar la consciencia adulta.

El niño en el Adi

El buen tutor limita la mente aun no formada del niño para que este ante un agresor no intente solucionarlo por el mismo sino que reciba la ayuda del buen tutorm el cual a fin de pausar su mente le da un premio con su logro e buen comportamiento o un esfuerzo en el estudio de las enseñanzas del maestro, ambas cosas son tajantes detenciones de la mente. Con el premio el niño se?siente ser su idolo, el buen tutor, Dios, superman, spidermen etc.

En ese estado de sentirse sel Dios el niño continua con su mente detenida ante ese gran logro, premio o meta alcanzada que es la de la fusion con Dios, la del sentirse ser Dios mismo.

Aun asi esta siendo dirigido siempre por su buen tutor el cual vigila ese sentirse Dios del niño.

El niño en el Sire

Cuando un niño esta en la zona de desequilibrio, en el Sire, esta siendo sometido por un falso tutor el cual no le ayuda ante las dificultades sino que le abandona obligandole a afoptar la postura del adulto es decir activar du mente y demas esencias, cuerpo, emociones y propia voluntad, para defenderse con ellas de su agresor.

Pero el niño no esta preparado para defenderse y en esa situacion pueden suceder dos cosas y ambas injustas, una es que el niño puede perder ante el agresor y ser esclavizado por este y otra es que el niño puede ganar y esclavizar a su atacante cobrando despues el botin que va a parar al falso tutor

El adulto en el Adi

Con su consciencia despierta el adulto tiene activas la mente y demas esencias ya formadas y con ellas entabla una buena relacion con los demas, con su projimo, realizando asi el proposito de la creacion. Esta Ahi, se siente bien.

El adulto en el Sire

El adulto tiene un falso tutor que le transmite bajas vibraciones desequilibradas de vicio y le da órdenes de tutor sin serlo.

Con lo cual anula la voluntad, mente, emociones y libertad del adulto haciendo asi que este no se pueda defender ante un agresor del cual el falso tutor tampoco le ayuda verdaderamente sino tan solo siguiendo los intereses del falso tutor es decir que este pone a luchar al individuo en contra de los enemigos del falso tutor en una guerra en la cual el individuo puede perderlo todo o puede ganar en cuyo casa su botin pasa a las manos del falso tutor. El falso Rey.

Esas situaciones de desequilibrio del niño y del adulto se corrigen cuando el niño sigue a su buen tutor y el adulto sigue a su propia consciencia.

Pues de ese ese modo ambos salen del Sire y regresan al Adi.

El falso tutor nunca obra con justicia ante las agresiones de sus enemigos hacia sus esclavizados (soldados) pues hacerlo seria delatarse a si mismo.

Sentirse Dios es propio de un niño y no de un adulto.

El sentirse Dios de un niño se transforma en la facultad extrasensorial del adulto la vual permite a este conectarse con sus hermanos para realizar con ellos el intercambio de frutos perfecto, la flor de la creacion.


Fernando Ortolá

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