Si se pone la cabeza de una gallina sobre la mesa, mirando de frente la superficie de esta, y a partir de su pico se traza una linea recta la gallina cae en trance, hipnotizada, afuera de si misma, se paraliza y hasta se puede morir.
Pues con la línea se le habrá presentado la dualidad de la vida, de un modo que para su pequeño cerebro resulta brusco por no poderlo comprender ni asimilar.
Lo cual deja paralizado su cerebro, su propia voluntad y demas esencias que la gallina como cualquier ser viviente tiene en su interior formando su ser.
En la gallina se produce internamente una inversión en los ciclos dualesc de su cuerpo controlados y dirigidos por el cerebro el cual al invertirse su captación del entorno invierte también los ciclos biológicos del cuerpo llevando a este a la parálisis, y a la muerte, por la falta del alimento vital.
Cuando en un ser vivo van bien los ciclos biologicos que su cerebro dirige entonces su cuerpo tiene salud, pues esos ciclos biologicos internos realizan bien el intercambio de esencias con los demas seres del entorno, y el cuerpo recibe asi el alimento vital que necesita para mantenerse con salud.
Un ser vivo con salud es dueño de su propia voluntad, cuerpo, mente y emociones. Es decir, dueño de sus propias esencias.
Pero si cuando por una violencia externa se altera el ciclo biológico interno de intercambio con el exterior entonces el individuo pierde eventualmente sus propias esencias personales que componen su ser. Es decir que pierde su propia voluntad, ya no es dueño de si mismo sino que care en manos de una voluntad ajena a el mismo. Pierde también el uso libre de su propio cuerpo, por caer en manos de otra guía ajena a la persona. Pierde también sus propias emociones pues le obligan a amar y adorar a un motivo ajeno a él mismo, y pierde su propia mente, pues le obligan a aceptar pensamientos ajenos que no son los suyos propios.
Es decir que ese estímulo violento externo hace que el individuo pierda sus propias esencias.
Esa perdida de esencias se produce de la siguiente manera:
Todo ser viviente tiende siempre a manifestar sus propias esencias al exterior, es decir, manifestar el aspecto de su cuerpo, su propia voluntad y acción, sus propios deseos y emociones, su propia forma de ser y de expresarse.
Eso es algo normal y natural, y necesario, pues a cambio de la expresión de un ser vivo hacia el exterior este recibe a su vez como respuesta la expresion de otro ser vivo, es decir que se realiza un intercambio comunicativo entre ambos, un intercambio de expresiones, de emociones, sonidos, imágenes, palabras, etc un intercambio de esencias, y ese intercambio es el alimento vital que mantiene con salud a todo ser viviente.
Para lo cual ese intercambio de esencias debe de permanecer en atmonia, es decir en su estado normal y natural de siempre.
Pero cuando ese intercambio básico y natural de esencias se ve alterado por un estímulo violento externo... entonces... la propia expresión que se dirige de un ser vivo hacia otro ser vivo no es recibida por este, pues ese impulso violento a alterado los ciclos naturales de comunicacion e intercambio y la expresión que va dirigida de un ser vivo a otro no es captada por este por llegar a destiempo, un poco antes o un poco después, a través de un ritmo alterado, y por eso el individuo que en ese momento hace de receptor no puede captar la expresión del individuo emisor, no es que no la quiera captar sino que no puede debido a ese destiempo en la comunicación.
Debido a eso el individuo que en ese momento es el emisor se sentirá frustrado por no poder expresarse, es decir porque a través de su expresión no podrá dar el alimento vital al individuo que en ese momento es el receptor.
Del mismo modo el individuo que en ese momento es el receptor también se sentirá mal por no recibir la expresión del otro, es decir por no recibir el alimento vital que el otro le da a traves de su expresión.
El intercambio de esencias entre ambos individuos ha quedado bloqueado.
A través de ese bloqueo el impulso violento interferente a robado las esencias de los agredidos, es decir de los individuos A y B en los que con su intervención ha bloqueado la comunicación armónica que habia entre ellos.
Pues A ofrece su expresión a B pero el impulso violento externo la intercepta adueñadose de ese momento expresivo y siendo así ese impulso violento el que se exprese ante B.
Igualmente le roba la misma esencia expresiva a B, pues no permite que llegue a él el verdadero alimento vital procedente de la expresion de A y a cambio le da un alimento falso e insano procedente del impulso violento interceptor, una esencia robada.
A través de esa interferencia en el intercambio que ese impulso violento externo ha producido los individuos pierden el control de sus propias esencias, es decir, el control de la propia voluntad, del propio cuerpo, de la propia mente y de las propias emociones.
Pues si cada vez que A intenta expresar su forma de pensar a B esta es interceptada y bloqueada por el impulso violento externo entonces llega un momento que si la expresión de la forma de pensar que A dirige a B se bloquea muchas veces... entonces... eso hace que finalmente A ya no exprese su forma de pensar hacia B, a cusa:de que ese acto de expresión del propio pensamiento ha sido reprimido tantas veces... que finalmente queda atrofiado, y A ya no expresa su forma de pensar a:B, porque ese impulso mental agresivo le ha bloqueado la manifestación de su forma de pensar, le ha lavado el cerebro, le ha robado esa esencia, y a su vez ha impedido que el alimento vital de esa esencia llegue a B sustituyendolo por un alimento falso e insano, es decir, por un pensamiento que no es el que procede de A, sino que es falso, pues ha sido robado, trastocado, alterado, procesado y monopolizado por el mismo impulso violento que en un principio ha producido esa interferencia.
Esa interferencia que realiza el impulso violento externo no solo atrofia y bloquea la esencia del pensar, la mente, sino también las demas esencias, la propia voluntad, emociones, y el libre uso del propio cuerpo.
El modo como el impulso violento externo interfiere en el intercambio de esencias es simplemente acelerandolo o desaceletandolo, es decir sacándole de su ritmo normal y natural de siempre y con ello desencajado los momentos de emisión y de captación de esencias que se producen a lo largo de cada ciclo de intercambio.
Haciendo así que la esencia que el emisor da no sea captada por el receptor y la que el receptor pide no le llegue nunca.
Lo cual enferma al emisor y al receptor por la falta del alimento vital que se transmiten del uno al otro.
Esa interferencia del impulso en el intercambio esencial entre la gente no solo daña en el exterior en la comunicación visible y externa que se realiza entre dos individuos, como pueda ser el realizar un trabajo físico conjunto, el hablar, etc sino que daña también en lo interno, es decir en lo que no vemos a simple vista, en los ciclos biologicos internos de nuestro cuerpo físico, y en la comunicación de intercambio natural que se produce entre los distintos organismos y microorganismos que componen nuestro cuerpo, alterando y bloqueando esos ciclos, igual que bloquea los ciclos de intercambio visibles y externos también bloquea los ciclos de intercambio invisibles e internos, entre unos elementos internos que por verse alterado el intercambio de energía vital que se produce continuamente entre ellos... enferman.
Todo ello es debido a la interferencia de ese impulso violento externo, el cual altera el intercambio vital entre los seres y elementos vivientes.
Para la gallina ese impulso violento externo es entre otros esa línea que se traza sobre una mesa a partir de su pico, por presentarle una visión demasado alterada de la dualidad de su mundo como para que el cerebro de la gallina lo pueda comprender y asimilar.
Lo cual altera los ciclos biologicos de su cuerpo anulandole sus propias esencias, su mente, su cuerpo su voluntad y sus emociones, y quedándose paralizadam hipnotizada, como muerta.
El mismo efecto que la gallina recibe a otro nivel el ser humano a través del impulso vital violento de la política que llega a sus sentidos.
Pues la línea ante los ojos de la gallina separa la mesa en dos partes, y la política ante los ojos del hombre separa su mundo en dos partes: derechas e izquierdas.
Esa división de la mesa hipnotiza a la gallina anulando sus esencias y poniéndola al servicio de quien ha trazado la linea.
Esa división de la política hipnotiza al ser humano anulando sus esencias y poniéndolo al servicio de los politicos.
La dictadura lleva hipnotozando y engañando al ser humano ya desde hace milenuos.
Una de: sus principales mentiras es decir que la dictadura es buena y que es el único camino para salir del caos: y conseguir la paz.
Debemos de poner letreros por todo el mundo que digan : ...
"...Mundo en obras.
Se prohíben los dictadores.
Peligro mortal..."
... Y otro letrero en la estratosfera que advierta a los visitantes extraterrestres con las siguiente palabras : ...
¡Cuidado, peligro, dictadores!
El caos no se corrige yendo al otro extremo del desequilibrio como dice la dictadura sino yendo al centro de equilibrio.
Cuando se intenta eliminar el caos yendo a la dictadura solo se consigue hacer que el caos vuelva a venir más adelante, y que vuelva a venir después otra dictadura, y que esta conduzca más tarde de nuevo al caos, y así sucesivamente, en una rueda de sufrimientos en la que el pueblo siempre sufre tanto en el periodo del caos como en el periodo de la dictadura.
Hay que salir de esa oscura rueda de dolor y sufrimiento.
El modo de liberarse de esa rueda oscura no es yendo al lado opuesto del lugar en el que nos encontremos, sino yendo a su centro, es decir, no yendo al otro lado de su desequilibrio, sea este caos o dictadura, sino yendo a su centro, al centro de equilibrio, al centro de la rueda, pues allí es donde existe la luz, y no la oscuridad del desequilibrio externo (el Sire) sino la luz y el equilibrio (El Adi)
La mentira siempre nos conduce al extremo del caos o al extremo de la dictadura.
La verdad siempre nos conduce al centro de equilibrio.
Para salir del desequilibrio no hay que ir al otro extremo del desequilibrio, pues allí solo existe la forma opuesta pero con el mismo desequilibrio.
Para salir del desequilibrio hay que ir al centro del equilibrio.
Pues siempre hay podibilidad de ir al centro del equilibrio.
Siempre hay posibilidad de estar ahí, en el centro, en la paz, en el equilibrio, en la armonía.
Siempre tenemos la posibilidad de estar Ahí.
Un abrazo
Fernando Ortolà
Fernando Ortolà
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Conclusiones y opiniones de los lectores: