En el nombre de nuestro pasado y de nuestro futuro

 Fíjate bien a tu alrededor en esa persona que es quien más te ama, pues es para ti más importante que el mayor ídolo  adorado.

Respetale en todo pues es tu fuente verdadera de vida, felicidad y salud.

La realización no está afuera de este mundo en un supuesto paraíso sino en este y se alcanza con el amor a Dios y al prójimo.

Los gigantes del pasado fueron la raza de humanos evolucionados que vinieron a ayudar al ser humano terrestre cuando este quedo recluido en el interior de la tierra al provocar la glaciación con sus guerras pasadas de alta tecnología.

Del contacto continuo entre extraterrestres y humanos en el interior de la tierra se formaron parejas y los hijos de estas son los gigantes de los que se dice que existieron en el pasado y que aún viven muchos de ellos en el interior de la tierra tal cómo se han visto a veces en Afganistan.

Aunque de todos quienes viven aun debajo de la tierra hay pueblos distintos, unos civilizados y otros primitivos, igual como en la superficie también hay poblaciones de distinto nivel evolutivo.

Hay que tener en cuenta de que en el interior de la tierra aún están más separados los pueblos que en la superficie pues les separan grandes masas de tierra y es más difícil de que se encuentren y de tener un contacto entre ellos.

Por eso en el interior de la Tierra hay especies humanas y razas que son aún más diferentes entre ellas que como son las razas de la superficie de la Tierra a las cuales les separa el aire o el mar el cual es más fácil de franquear que la masa sólida del interior terrestre la cual además cuenta con distintos niveles mientras que la superficie de la Tierra se encuentra más o menos en el mismo nivel.

Hace unos once mil años hacia el final de la última glaciación los seres humanos que habían quedado recluidos en el interior de la Tierra empezaron a salir al exterior.

Ellos son los que construyeron las construcciones prehistóricas los dólmenes los menires etc los cuales se ven por todo el mundo pues no salieron solo por un lugar sino por distintas partes de la Tierra para poblar de nuevo la superficie.

Ellos manejaban las grandes piedras porque habían tenido que habituarse en ello para usarlas en la construcción de los túneles y habitáculos del interior terrestre para poder contener a la tierra y vivir con seguridad en su interior.

Por eso al salir a la superficie pusieron todas esas piedras en forma de dólmenes, menhires y otras construcciones en las que a menudo se ven dos piedras verticales y una arriba en posición horizontal cómo un símbolo de que el nuevo suelo en donde van a vivir es la superficie del planeta y ya no en el interior.

La peqieña ventana circular que aparece en muchos dólmenes es la entrada de aire al mundo intraterreno en donde vivían.

Las pequeñas prominencias que se ven en esas construcciones como pequeñas bolas de piedra pegadas a las partes lisas de las grandes piedras representan a los tapones que tapan esas pequeñas ventanas por donde entraba el aire al interior de la Tierra, indicando así que quedan cerradas para siempre ya que van a vivir en el exterior y ya no necesitan los conductos de aire para poder sobrevivir en el interior de la Tierra.

Las pirámides eran una de esas construcciones a través de las cuales los intraterrenos se iban manifestando al exterior empezando por tener un contacto a través de las pirámides para después pasar a vivir al exterior totalmente.

Por eso en el subsuelo tanto de las pirámides cómo de otras construcciones antiguas hay pasadizos y el sentido de estos es porque esas pirámides y construcciones antiguas eran el contacto del mundo intraterreno con el exterior.

Todas esas construcciones antiguas están orientadas a los puntos cardinales a los equinoccios y solsticios.

Eso es debido a que los puntos cardinales equinoccios y solsticios representan el orden natural de esencias a través de las cuatro estaciones de primavera-verano otoño e invierno.

Ese es precisamente el ciclo natural que quienes provocaron las grandes guerras con su tecnología antes de la última glaciación olvidaron. Olvidaron los ciclos de la naturaleza, los violaron, y a causa de eso alteraron esos ciclos y se produjo la glaciación que tuvo que recluirles en el interior de la Tierra durante más de cien mil años.

Por eso después de ese largo periodo al salir a la superficie lo primero que se plantearon en recordar y no olvidar nunca más son los ciclos de la naturaleza tal como representan las estaciones del año, equinoccios solsticios, puntos cardinales, salidas y puestas de Sol etc.

Por eso nada más salir a la superficie y construir los menhires y los dólmenes y demás construcciones antiguas orientaron todas ellas a lo que antes habían olvidado es decir a los ciclos de la naturaleza y muy seguido al equinoccio de primavera y a las salidas del Sol en esta época lo cual es vital conocer para poder cultivar la tierra y procurarse los alimentos.

Eso es algo que en aquel pasado remoto antes de la glaciación también perdieron: el contacto con la Tierra, con los ciclos naturales, con el cultivo de los propios alimentos, pues la tecnología lo producía todo y perdieron el contacto con la naturaleza de la propia tierra, con sus ciclos naturales, lo cual les llevó al desequilibrio, a la guerra entre ellos y a la destrucción de su mundo y posteriormente por el abandono de los ciclos naturales y su alteración les llevó a la glaciación.

Por eso al salir de nuevo a la superficie hacen esas construcciones orientadas totalmente a los ciclos de la naturaleza para mostrar así que no los van a volver a olvidar nunca más, que van a vivir según ellos, que van a aprender a cultivar la tierra, pues si no lo hacen así no solo van a tener que continuar cazando animales para poder sobrevivir tras su reciente salida al exterior y no solo van a tener que seguir en contacto con seres muy diferentes a ellos en el interior de la tierra que les mantengan, sino que van a volver a alterar el ciclo natural de la Tierra, por eso al salir de nuevo a la superficie hacen estas construcciones para recordar al ciclo natural que no deben de olvidar nunca más, y otra volver a conectar de nuevo con él.

Los hombres prehistóricos tal como los define la ciencia actual muestran esa extraña contradicción de tener tanto arte en sus manos para poder dibujar con tanta sensibilidad los animales en las paredes de las cavernas mostrando así que esos animales eran criaturas bellas de una gran nobleza y belleza lo cual contrastaba con las lanzas que también dibujaban alrededor mostrando que con esas lanzas debían de cazar a esos animales tan bellos para comérselos y poder así sobrevivir.

Lo cual para unos seres humanos que habían tenido una educación tan milenaria en el interior de la Tierra y que tenían una ciencia y un arte cultivado el hecho de tener que cazar y comer esos animales tan bellos que pintaban en las paredes de las cavernas debió de haber sido un gran desafío, y si eso se presentó así ese es el escenario perfecto para que esos hombres prehistóricos que salían del interior de la Tierra recibiesen la lección de que si no queerian seguir comiendo esos animales tan bellos y si no queerian seguir hiriendo así su sensibilidad artistica debian de usar su inteligencia para armonizarse con los ciclos de la naturaleza y cultivar el campo para procurarse los alimentos y no tener que seguir cazando, matando y comiendo a esos animales tan bellos que pintaban en las cavernas con tanto arte y amor hacia ellos.

Esa misma lección que esos hombres prehistóricos estaban recibiendo es la misma que mostraban a través de la orientación de sus antiguas construcciones como los dólmenes dirigiéndolas hacia los puntos cardinales, equinoccios y solsticios, en combinación con las salidas y puestas de Sol y demás elementos de la naturaleza y de su ciclo natural, es decir que mostraban que querían hacerlo bien, querían armonizarse con los ciclos naturales, para poder trabajar con la naturaleza, cultivar el campo, cosechar sus alimentos y no tener que cazar más a los seres vivos para tener que comerselos y poder sobrevivir.

Esa misma lección les llevaba a comprender que igual como era un desafío para ellos cazar esos animales tan bellos tampoco debían de hacer guerras entre ellos, tal como las hicieron en aquel pasado lejano a través de las cuales desequilibraron los ciclos naturales y provocaron la glaciación, lo cual no debía  de volver a suceder y por eso al salir a la superficie recordaron todas estas cosas de un modo muy especial.

En los dólmenes menires y construcciones antiguas se encuentra la simbología que da este mensaje que explica el pasado de nuestra humanidad, es decir el lugar de donde venimos, en cierta manera también para prevenir a sus descendientes para que no les vuelva a pasar lo mismo que les pasó a ellos, es decir que cuando lleguen a desarrollar la tecnología no produzcan grandes guerras que vuelvan a provocar una nueva glaciación y se tengan que volver a ir a vivir al interior de la Tierra durante varios miles de años, tal como ellos estuvieron hasta que la superficie estuvo de nuevo preparada para poder salir y ser habitada.

Al mismo tiempo que salieron quisieron perpetuar ese mensaje para la posteridad.

Muchos de los que aún viven bajo la Tierra en el subsuelo son especies humanas que son descendientes de aquellos que las radiacciones de las bombas atómicas de aquel pasado lejano deformaron creando así razas de humanos deformados que han seguido viviendo en el subsuelo terrestre desde entonces y que aún viven allí al igual que son las razas de gigantes que eran fruto de la mezcla de los humanos evolucionados que ayudaban a los terrestres y los terrestres protegidos por ellos y que fueron fruto de los contactos que se establecieron por el roce continuo de miles de años entre entre humanos terrestres y humanos más evolucionados y que fue un contacto que se estableció debajo de la tierra, en el subsuelo.

En la parte de la Tierra en la que se conserva esa civilización humana intraterrena de un modo más íntegro es debajo de los polos, del polo norte y polo sur, debajo de las grandes masas de hielo tal como hay gente que ha visto allí a través del cristal del hielo grandes ciudades tecnológicas en donde esos humanos más evolucionados que ayudaron a los terrestres y los terrestres conviven con armonía.

Ellos aún no han salido a vivir al exterior porque su tecnología es tan alta que en realidad pueden salir al exterior de la tierra y a otros planetas en un instante, sin necesidad de dejar de vivir allí en donde están.

Todas las construcciones antiguas en su simbología hablan de la salida de los humanos intraterrenos o digamos intraglaciates al exterior.

Incluso las cavernas en donde se han encontrado pinturas prehistóricas de animales las cuales se hicieron en esos conductos de salida al exterior en donde quienes vivían en el interior debieron de adaptarse al exterior y cazar animales para poder sobrevivir, es decir hacer lo que nunca habían tenido que hacer antes en el interior de la Tierra y por eso pintaban sus escenas de animales y las paredes como algo sensacional, algo que no habían visto antes y que era nuevo para ellos.

En las paredes de las antiguas cavernas también se ven pinturas de seres extraños que parecen extraterrestres.

Estos eran los que cuidaban de los humanos cuando vivieron en el subsuelo y también los pintaron al salir para tener un recuerdo de ellos al igual que pintaron las cosas nuevas que veían en el exterior como son los animales que debían de empezar a cazar para poder sobrevivir.

Las cavernas eran los túneles de salida al exterior, a ese mundo que tanto desconocían, temían y además ansiaban llegar a él, con unas fuertes y confrontadas emociones de alegría, sorpresa y a la vez terror, tras una espera de miles de años para que eso algún día se produjese.

Esas cavernas o puertas de salida a su vez les motivaban a crear sus viviendas en el exterior tal como las habían creado en el interior de la Tierra con el manejo de grandes piedras tal cómo aún podían hacer e hicieron empezando por construir con las grandes piedras esos símbolos de los dólmenes y de los menhires para decir que ya no iban a vivir más en el interior de la tierra ni en las cavernas sino que iban a empezar a construir sus propias casas y a edificar su propia civilización sobre la superficie terrestre.

Una de esas construcciones antiguas es un grueso muro con una pequeña pirámide pegada en una pared lateral y la cual está a 90 grados de la posición normal vertical es decir que su vértice superior está dirigido en horizontal.

Esa es otra clara simbología que expresa que esa gran piedra en forma de pared con una pequeña pirámide al lado es una puerta al interior de la Tierra la cual ha quedado abierta y por eso está en posición vertical, por eso está la pirámide ladeada hacia la derecha, porque cuando la puerta estaba cerrada la pirámide estaba con su vértice superior hacia arriba, indicando con ello también que las pirámides eran efectivamente parte de esas antiguas construcciones que los intraterrenos que salieron a vivir a la superficie hicieron para establecer un contacto con el exterior y a su vez para expresar con símbolos que ya no iban a volver a regresar al subsuelo pues esas puertas habían quedado selladas, ya estaban afuera y afuera se iban a quedar, en la superficie, la cual ya era un lugar habitable de nuevo.

Por eso es importante saber estas cosas y pensarlo tres veces antes de iniciar una batalla por pequeña que sea para evitar que esa desgracia de tener que estar todo un período de glaciación encerrados en el subsuelo terrestre no vuelva a suceder nunca más, pues ya fueron suficientes los más de cien mil años que la humanidad terrestre tuvo que vivir encerrada en el interior de la Tierra esperando a que se fuera la glaciación de la superficie para poder volver a salir a habitar en ella.

Dar este mensaje a todos los que podáis darlo para que sean conscientes de nuestro pasado y dejen de jugar con la energía nuclear y a las batallitas para que no vuelva a suceder lo mismo.

En el nombre de nuestro pasado y de nuestro futuro

Fernando Ortolá