Estar en las eras adultas de la humanidad en las que nos hallamos actualmente y no activar la mente es peligroso, pues por inercia esta cae en manos de la oscuridad en el caos jerarquico el cual nos quita energia y nos enferma, pues en las actuales eras adultas de la humanidad ya no está el maestro físico de las pasadas eras infantiles, y el único modo para que el individuo adulto no caiga en manos de la oscuridad es activando las propias esencias adultas ya crecidas y formadas como son la mente (la esencia S) el cuerpo (la esencia F) las emociones (la esencia E) y su identidad (la esencia C)..
Es decir que en las actuales eras adultas de la humanidad en las que estamos el ser adulto debe de activar su mente y demás esencias que componen su ser, y el modo de activarlas es siendo él mismo, siguiendo la voz de su propio corazón, la cual es la presencia continua en su interior del Dios invisible del individuo adulto de las actuales eras adultas de la humanidad, una guía invisible siempre presente con la forma de la voz del corazón del ser adulto y a la cual este sigue simplemente siguiendo la voz de su corazón, es decir, siendo él mismo, haciendo lo que siente, actuando con la independencia y propia determinación que todo ser adulto debe de tener, actuando de un modo integro y completo, con una identidad adulta ya integra y formada capaz de decidir por si mismo lo que debe de hacer en cada situación de su vida, actuando con la sensatez y cordura de todo ser adulto. Esa actitud del ser adulto, el seguir la voz de su corazon, el ser él mismo, es lo que la cenuitica denomina el estar Ahí. Lo cual es a la vez estar en el Padre universal, en la energía vital, en el amor, la paz y la igualdad con todos los seres, el activar las 4 esencias ya formadas que componen el ser adulto, el cuerpo, la mente, las emociones, y la identidad o propia voluntad, es decir, el ser uno mismo, el estar Ahí, tal como todo ser adulto sabe y puede hacerlo por si mismo, estar Ahí como siempre Ahí.
Estar Ahí es respirar la energía vital en cada instante.
Hay que estar Ahí para poder respirar la energía vital y tener salud.
El estar Ahí es lo más sencillo de cualquier ser, es el activar su propia voluntad, el ser él mismo.
Pero ser uno mismo de verdad, actuar de verdad con el propio determinismo.
Es decir, estar Ahí.
El conocimiento cenuitico ayuda a saber cuáles son los ingredientes que componen el estar Ahí del ser adulto para poder saber si realmente estamos Ahí si realmente el individuo está siendo él mismo y de un modo íntegro, guiado por su propio determinismo o si por el contrario está siendo afectado y conducido por una oscuridad o energía negativa ajena a él que le está induciendo a actuar de un modo distinto a como él lo haría y por lo tanto llevándole a sentirse mal.
Cada cual se debería de plantear lo siguiente:
¿Estoy siendo yo mismo de verdad o estoy siendo inducido por una entidad ajena a mi que me fuerza a actuar como yo en realidad no quiero?
¿Estoy siendo yo mismo o no?
Estas son algunas pistas que el estudio cenuitico ofrece para saber si estás siendo tú mismo o no:
1- Cuando un individuo tiene un sentimiento de violencia o agresión hacia otros individuos no está siendo él mismo sino que esta poseído por una energía negativa ajena a él que le conduce a atacar a ciertos individuos para defender los intereses de esa misma energía negativa que le conduce a ello pero no los intereses del propio individuo.
Esto es así porque todo ser viviente está creado solo para el amor y no para la violencia y la guerra. Así que cuando un individuo está siendo él mismo actúa siempre con paz y cuando no está siendo él mismo actua con violencia.
2- El estar Ahí en la energía vital, en el ser uno mismo, en el Padre universal... es algo directo , y continuamente presente, es decir, que nada se debe de interponer entre el estar Ahí y el individuo.
Si algo se interpone entre el estar Ahí y el individuo es una energía negativa ajena al individuo que le intenta afectar y poseer.
Estar Ahí esta siempre por encima de todo, pues es el origen de todo y por eso la conexión con el Ahí siempre puede y debe de ser directa, sin depender de ninguna esencia, aunque el Ahi sí que se manifieste a través de una esencia u otra, pues las esencias nacen del Ahí y se manifiestan a través del Ahí.
3- Esa interferencia negativa entre el estar Ahí y el individuo se puede producir en el nivel de las 4 primeras esencias. A través de la esencia S, de la mente, cuando un individuo piensa algo repetitivamente sin conseguir comprenderlo y ese pensamiento le atormenta como disco rallado, y le consume la energia, esa es la señal que indica que telepaticamente esta siendo combatido interior y mentalmente por una energía negativa que le intenta poseer y por eso distorsiona sus pensamientos sin permitirle pensar con claridad y de un modo normal. Cuando eso sucede el individuo debe de abandonar esa situación, es decir, dejar de pensar, por un momento, hacer otra cosa que el Ahí le estará dando en ese momento, por ejemplo hacer música (esencia E) o hacer algún trabajo (esencia F) u otra cosa... pues en ese momento el Ahí en realidad ya no le estará dando la esencia S del pensar sino por ejemplo la esencia F del trabajar, y entonces al trabajar le vendrá de repente la comprensión de lo que antes pensaba dando vueltas a su cabeza sin conseguir entender, y después de repente ha aparecido esa comprensión en su mente de un modo espontáneo e instantáneo, mientras trabajaba, es decir cuando estaba haciendo otra cosa, cuando ya no pensaba en ello.
Ese fenómeno muy real en la vida de todos es otra demostración de que el estar Ahí en realidad siempre viene de arriba, del punto nas alto o vértice superior del triángulo de nuestras vidas, el punto 3, de un lugar que está por encima de todo, de todas las esencias que componen nuestro ser, aunque si que se manifieste a través de una esencia u otra en cada momento, sin embargo está por encima de las esencias a través de las cuales se manifiesta, está en una dimensión más alta en donde vive el Padre universal y hacia la cual vamos con nuestra evolución, pero a la cual aún no tenemos acceso, pero si que nos permite conectar con ella en todo momento y de un modo directo, conectar con la energía vital, con el impulso vital de cada momento, con el ser uno mismo, es decir que nos permite estar Ahí siempre de un modo directo, en toda situación.
Lo mismo sucede a nivel de la esencia E.
Cuando intentemos sentir algo sin conseguirlo es porque una energia negativa ajena nosotros estará intentando poseer nuestras emociones, por lo que deberemos de abandonar esa situacion, y hacer otra cosa, por ejemplo usar la mente, ponetnos a estudiar algo, por ejemplo matemáticas, pues el Ahí en ese momento ya no nos estará dando la esencia E de las emociones sino la esencia S de la mente, del pensar y estudiar.
Lo mismo sucede con la demás esencias,la esencia F del cuerpo y la esencia C de la identidad.
El Ahí siempre da una esencia u otra para que al tomarla siempre podamos estar Ahí sin que ninguna energia negativa ajena pueda interferir entre el individuo y el estar Ahí.
4- Un individuo adulto cuyo objetivo no es alcanzar la buena sociedad está siendo poseído por una energía negativa ajena a él mismo. Por eso deberá de incluir en su vida el alcance de la buena sociedad para poder ser de nuevo él mismo, es decir para poder estar Ahí.
Por el estar Ahí de todos.
Fernando Ortolá
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Conclusiones y opiniones de los lectores: